El Mandamiento

Dentro de las relaciones amistosas hay un mandamiento claro: “no te meterás con el mino de tu amiga(o)” se dice que quien osa romper este mandamiento, debe estar dispuesto a que las penas del infierno caigan sobre él: termino de la amistad probablemente y luego cargar el estigma de ser “el que se cagó al amigo”. Sin embargo, yo tengo un par de excepciones:

1. Cuando se está en la etapa previa, de conquista. Acá si las cosas están claras entre las amigas se hace una declaración de intenciones, quizás una de las dos quiere al chiquillo para algo más serio y por tanto, la otra amiga debe dar un paso al lado en “post del amor”. Si las dos lo quieren para pasarlo bien, se hace un acuerdo de señoritas y “que gane la más mejor” “yo lo vi primero” o cualquier otro acuerdo

2. Cuando la relación entre mino y amiga no incluya sentimientos, por parte de ella ni de él. Los de ella pueden costar la amistad, los de él te dan una lata tremenda porque buscará sacarle celos a tu amiga contigo o buscará acercarse a tu amiga a través de ti dependiendo de que tan cagado esté.

3. Cuando no tienen problemas con compartir babas, esto normalmente es con la condición número dos cumplida. De hecho cuando pasa esto, el tema no resulta tabú para ninguna de las dos y hasta se pueden compartir experiencias. Puede parecer un poco sórdido, pero cuando las cosas están claras no hay problemas de este tipo: en primer lugar, asumes que el hombre en cuestión se puede estar tirando a cualquier otra mina y bueno, dan las coincidencias de la vida que fue tu amiga. De repente puede ser hasta bueno, al menos no se está metiendo con cualquiera.

Ahora, que pasa cuando una está entremedio de dos amigos? Creo que en ese sentido los hombres son más recelosos del tema, por un complejo de macho alfa y territorialidad. Las únicas veces que he escuchado hablando dos hombres que se comieron a la misma mina, es para descuerarla, pero uno entiende que hay despecho y orgullo de hombre herido de por medio así que en vez de espantarse por lo que dicen, se termina compadeciendo por ellos. De todas maneras, también se aplicará la condición 1 de manera más cruda eso si, los hombres son mucho más jugados para competir, son más del “que gane el mejor” que otra premisa.

Aquí una canción que habla de esto, pero creo que más de la perspectiva amorosa del hombre. Para todas es conocida la perspectiva amorosa de la mujer, porque planteamos el problema en la amiga como en “Maldita Amiga” de las Supernova. Pero los hombres culpan a la mina igual y no al amigo… que injustas somos con nosotras mismas!